Abajo, tan arriba.
- Tuve nuevamente ese sueño extraño, ¿sabes? Ese en donde estoy cayendo, en medio de una absoluta oscuridad, dentro de un azul profundo. Caía con una gracia lenta, como si el tiempo se hubiera detenido, todo estaba confuso, intentaba moverme de la posición en la que estaba, pero era imposible. Entonces vinieron los truenos. Las luces destellantes me hicieron ver donde estaba cayendo, aquel espacio tan enorme, me pareció confuso y al mismo tiempo tan familiar. Quise hablar, gritar, pero todo lo que pude ver eran las palabras salir de mi boca en forma de burbujas, mi comprensión del lugar fue absoluta. No caía en un bastó cielo nocturno, sino en las más oscuras profundidades del mar y lo comprobé cuando otro trueno se alzó sobre los cielos acuáticos, y pude ver un sin fin de criatura marinas moviéndose como extrañas sombras. Cientos y miles de peces navegando sin ruta, mantarrayas dando rodeos, un par de ballenas nadando en las distancias, llamando a l